Hace unas pocas semanas, me vi flaquear mi mirada sobre el Lejano Oriente, pense mucho y salieron interrogantes ¿Cambiar en todos los sentidos? ¿Dejar de ver las tierras del Sol Naciente? Y volver a Occidente... Luego de oir muchas canciones y algunas películas de estas tierras americanas de doble raiz. Un momento de verdadera confusion, y desconcierto. ¿Para donde mirar? ¿Qué influencia tomar para mi pronto renacer? ¿Y para luego transmitir? ¿Qué hago en este momento de flaqueo?
Pero llegaron lo que para mi fueron señales, viendo (sin buscarlas) algunas peliculas orientales. So Close, Zatoichi... y otras más pero en especial (esa si buscada) The Last Samurai, con la me iddentifico profundamente, un alma errante de occidente que encuentra redención en las tierras del Japón, y luego viendo algunas series de anime clásicas y no tanto, otras raras pero magistrales, que capturaron mi atención, luego de unos días, pude llegar a la conclusión seguir en Oriente, con mi mirada en el Imperio del Sol Naciente. Tomando su influencia y sus valores, que en este mundo actual se van perdiendo y luego poder transmitirlos a mis próximas generaciones... Volvi a sentirme apegado al Japón con la firmeza de siempre, a su pasado guerrero y honorable. Volvi a renacer, con mis influencias intactas y reforzadas, el espíritu del Japón que abrace hace tiempo sigue en mi, lo mismo que la luz de mi Diosa.
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