Días tormentosos hay en puerta, busco la redención y el perdón conmigo mismo, primero. Una profunda revisación para ver todo lo que esta mal en mi. Hacer un exorcismo, para borrar la estela de errores. Que aunque sé que quedaran sus estigmas quiero remediarlos y compensarlos. Si quiero renacer hay que hacerlo, tengo su calor. Que ella me dio, pero por ser como soy ahora perdi la armadura y la nueva espada, solo tengo ahora el calor de todos los días que estuvimos juntos, para lograr mis metas.
Ahora en este viaje, debo cambiar, no solo para los demas sino para mi mismo. Enfrentarme conmigo mismo. Ver que esta mal en mi y quitarlo, como una mala hierba, para que alli crezca una flor. Convertir un terreno árido en un jardín.
Ahora empiezo a entender cada palabra, cada marca que hay en mi corazón. Cada frase que me llego y veo lo estupido que fui. Cada palabra duele, la verdad siempre duele, y más cuando vienen del alma gemela y de un alma amiga. Alma gemela que por mi culpa he estado a punto de perder... y que ahora intento recuperar.
Quiero arder, y por primera vez, no hay impidimento, nada me impide que lágrimas salgan, salgan y quemen, pues estan cargadas de culpa y remordimiento. Viejos pensamientos me asaltan como siempre, mi conciencia esta vez es más implacable que las otras veces y no tiene miramientos. Pero no me resisto, justo es lo que la conciencia me dice.
Muchas reflexiones y algunas conclusiones salen a la luz. Y una frase y una pregunta salen por otra vez, estas palabras a fuego son quienes hacen que salgan... Prefiero no escribirlas... Leo una y otra vez, todo lo que lei... las palabras de impregnan cada vez más, que encienden mi mayor temor, que no sea tarde...
Ahora si el sueño se fue, larga sera la noche y las que vendrán también. Hay reflexiones y conclusiones que ya han salido. Que al son del piano van desfilando en mi mente y en mi alma. Asi estan mientras me aventuro en las profundidades de mi interior. Siento el frío de la oscuridad. La única luz proviene de la que ella me ha dado. El único calor para protegerme también.
Ahora sé y comprendo que debo dotarme de mis propias armas y armadura para alimentar esa luz y convertir la oscuridad en claridad. Llevar las riendas. Demostrarme y demomoestrale que soy digno, demostrar que valgo la pena y que la Vida y ella me digan: "Lo has hecho bien" con una sonrisa. Ser un guerrero, un hombre de honor para mi mismo pero sobre todo para ella...
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